7 Junio 2019
Arde, quémame, como turbia gasolina infecta
En los suburbios escucho el ruido que me recta
Aridando entre madejas de oídos
Vacuo insulto que nos recita
Al decoroso Reino de Dios que nos habita
En los suburbios escucho el ruido que me recta
Aridando entre madejas de oídos
Vacuo insulto que nos recita
Al decoroso Reino de Dios que nos habita
Si tuviera fuerzas, mi corazón levitando,
me sumergiría en mi hermoso paisaje de muerte
Si alcanzara la luz que deslumbra mi pesadez
llegaría a tus besos, solo con pensar que el viento,
Si alcanzara la luz que deslumbra mi pesadez
llegaría a tus besos, solo con pensar que el viento,
nuestro viento, jamás es pasajero
Crea en mi vida un consuelo
Repatriada en la búsqueda del día sereno
Me consumo en el oscuro páramo de la poesía
alargando mis aterrorizadas palabras
Soy su serpiente
escondido entre el misterioso juego de la grama
Me consumo en el oscuro páramo de la poesía
alargando mis aterrorizadas palabras
Soy su serpiente
escondido entre el misterioso juego de la grama
don dumas